Ir al monte con nieve

Dependerá de si vamos a hacer senderismo invernal o vamos a zona llana a pasar el rato y poco más. Caminar por la nieve es más peligroso que en un día primaveral, más lento y más cansado. Y hay que combatir las temperaturas bajas y estar preparado.

Deberemos considerar algunos puntos específicos además de prudencia como para cualquier salida al monte:
  • Acudir a oficinas de información para que nos asesoren sobre el senderismo invernal y diferentes rutas
  • Al atardecer puede ser peligroso por lo que saldremos temprano de mañana y volveremos a media tarde
  • Llevar a mano los números de emergencia y botiquín, estudiar la ruta con antelación y saber si es zona de aludes, saber de orientación y conocer el entorno no perdiendo de vista el camino de vuelta
  • Llevar equipamiento específico: ropa adecuada, cuerdas y saber caminar con crampones o raquetas y usar el piolet al caerse al suelo es básico para nuestra seguridad. También conviene llevar una sonda, en caso de que pueda sorprender un alud
  • Ir en compañía e intentar ir siempre a la par
  • Estar atentos de la meteorología y si el clima se complica a media ruta lo mejor es dar media vuelta y volver a casa 
  • Si nos quedamos atrapados necesitaremos conservar nuestra temperatura así que intentaremos hacer fuego como en este vídeo y veremos la información sobre qué necesitaremos y precauciones al hacerlo además de visualizar vídeos de cómo hacer fuego real rodeados de nieve.

Juegos con niños

A los niños no hace falta ofrecerles demasiadas opciones para que se diviertan en la nieve porque ya de por sí saben disfrutarla, pero no está de más tener algunas ideas extras además de hacer el conocido muñeco de nieve, guerra de bolas, hacer el ángel, o deslizarnos en trineo o con una simple bolsa de plástico. El colorante alimenticio no contamina y puede ser el producto estrella del día.
  • Dibujar en la nieve con chorros de agua con colorante
  • Pasar la bola: colocarse en círculo y pasar de unos a otros una bola compacta, a ver a quién se le rompe en las manos
  • Portería y canasta: trazar con colorante una portería o un círculo a modo de canasta para encestar unas cuantas bolas, o úsalo a distancia para ver quién lanza más bolas dentro del circulo
  • Castillos: usar los juguetes de playa para hacer una construcción a modo de ciudad con sus puentes, túneles...
  • Laberinto: hacer un recorrido a modo de laberinto levantando paredes con nieve hasta el tobillo por ejemplo, o a gusto
  • Esconder un tesoro: la zona deberá estar pisada previamente para dificultar la búsqueda. Quien lo encuentre será el próximo en esconderlo
  • Rastrear: buscar huellas de animales, fotografiarlas, y seguid la trayectoria a ver a dónde os lleva
  • Comederos de pájaros: improvisar comederos hechos con el currusco de un pan quitándole la miga y meted unos puñados de alpiste, colgadlos de una rama y esperar a ver si algún pájaro se acerca. Si podéis hacer la cuerda de sujeción con elementos naturales mejor
  • Pistas a nuestro paso: si vais a dar un paseo dejad pistas, trocitos de ramas, hojas, piedras... y seguidlos a la vuelta 
  • Construir un iglú, será más fácil controlar la altura si tomamos como referencia un árbol junto al que hacerlo
  • Hacer un túnel: hacer una bola grande o levantar una montaña de nieve de medio metro de altura e ir excavando y vaciarla. Si lo hacemos con cuidado podemos abrir un agujero en la parte superior para sacar la cabeza

Perros en la nieve

Es un error pensar que porque sea perro puede con todo. Dependerá de razas y de lo friolero que sea cada uno aunque sí es cierto que los perros pueden modificar naturalmente su metabolismo para adaptarlo a las bajas temperaturas; hacen que trabaje más deprisa, acelerando la circulación de la sangre para mantener el cuerpo caliente y activan la circulación en la zona de las patas mantieniendo sus almohadillas más calientes que nosotros nuestros pies.

Por lo general les escanta, son felices, se revolcarán, escarvarán, brincarán, correrán como locos de alegría. Será importante tomar algunas medidas sobre todo si nos vamos al monte y vamos a pasar horas fuera de casa:
  • Abrigo: ya hemos pasado por un episodio de vómitos e incesantes temblores por frío y no queremos que se repita. El pelo sedoso de una sola capa propia de algunos perros de raza pequeña, sus patas cortas y que lleva la barriga pegada al suelo hace que absorba agua como el papel por lo que vestirla es imprescindible si estamos lejos de casa pese a que después nos toque quitar nudos durante horas. 
  • Cuidado de las patas: el perro suda a través de las almohadillas de sus dedos y al entrar el sudor en contacto con la nieve puede congelarse, inmovilizando los dedos o incluso la pata entera. Tenemos que revisarle las patas de vez en cuando para asegurarnos que no se le forman bolas de nieve entre las almohadillas y secarlas y quitar restos de nieve con una toalla de vez en cuando.
    La sal también les puede causar heridas cortantes y quemarles.
    Y si no le ponemos botas al menos le aplicaremos con antelación algún tipo de protector de almohadillas que forman una fina pantalla que ayuda a prevenir posibles daños y les protege de las bajas temperaturas. En su defecto ponerle vaselina antes de salir de casa y llevarla y aplicársela varias veces al día.
  • Riesgo de pérdida: los perros se pierden con mayor facilidad con nieve ya que para ellos es más difícil olfatear cuando el suelo está cubierto y buscarán rastros de manera más descontrolada que por lo general, así que si no acostumbra a acudir a nuestra llamada mejor no soltar la correa siquiera. Ponerles una prenda fluorescente es una opción.
  • Evita que se lama las almohadillas: no solo para que no se quite la protección sino porque la sal que esparcen sobre la nieve para evitar el hielo les puede causar intoxicación y vómitos
  • Vigilar lo que come: es muy habitual que se lancen a comer nieve, pero ésto solo le provocará problemas estomacales, náuseas y vómitos. Llevaremos agua siempre ya que va a gastar mucha energía y debemos evitar que pase sed
  • Vigilar restos de anticongelantes: tienen un sabor y olor agradable para ellos pero causa envenenamiento por lo que si temes que haya restos aléjate de la zona
  • Sol: si hace sol será probable que pueda quemarse la nariz por lo que protegeremos la zona
  • Síntomas de hipotermia: tristeza, temblores y andares lentos o nerviosismo
  • Lavar las almohadillas y vigilar las orejas al llegar a casa: quitaremos cualquier resto de sal o anticongelante de las patas y revisaremos las orejas y secaremos bien tanto unas como otras
  • No cepillar la nieve del pelo : es como si arrancásemos pequeños cristales destrozándoselo así que esperaremos a que se deshaga secándolo con una toalla. Ya lo cepillaremos al llegar a casa cuando le pasemos el secador

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